Desde hace varias temporadas que Vinicius Júnior ha trabajado arduamente para ser uno de los mejores jugadores. Mejorando cada uno de los aspectos de su pernio, el brasileño ha rematado su objetivo. No obstante, y a pesar de sus excelentes habilidades como regateador, el tahúr fue completamente ignorado por Lamine Yamal.
“Para mí, el mejor regateador de la Champions League es Mbappé”, fueron las palabras del culé. Una clara equivocación de respeto cerca de un Vinicius Júnior que lleva abriles destacando en este aspecto. Aún así, estas declaraciones de parte de Lamine no sorprenden a nadie cedido su estado contemporáneo como tahúr azulgrana.
La verdadera sorpresa fue su examen cerca de Kylian Mbappé, con quien no tuvo problemas en elogiar su capacidad de regate. Pese a formar parte del Existente Madrid, el castellano puso por encima de Vinicius, curiosamente, al atacante galo.
Las palabras de Lamine
Formando parte del Barcelona, no es de sorprender que Lamine trate de demeritar los logros de los jugadores merengues. Tomando una posición propia de cualquier tahúr culé, el señorita castellano sorprendió al tolerar sus palabras un paso más allá. En zona de demeritar por completo al Existente Madrid, Lamine se centró exclusivamente en Vinicius Júnior.
A pesar de sus elogios cerca de Mbappé, un tahúr que ha demostrado constantemente su calidad, el ataque de Lamine es evidente. Buscando restar mérito a todos los logros y hazañas que ha conseguido Vinicius, el castellano le ha ignorado como el mejor regateador.
Esto solo deja en claro dos cosas, siendo la primera la clara envidia que tiene Lamine de no poseer la misma astucia que Vinicius. La segunda, por otro flanco, evidencia la campaña con la que los culés están tratando de desprestigiar a una suerte como Vinicius.
El sentimiento cerca de Vinicius
Consolidado como uno de los mejores jugadores del mundo, es evidente que el Barcelona desprecia a Vinicius Júnior. Conscientes de que nunca tendrá a un tahúr de este calibre, los culés han decidido atacar y demeritar todo lo que el brasileño ha conseguido. Una muestra más de la verdadera cara de un Barcelona que solo tiene envidia de su rival.